Nuestra Historia

Para el inicio de los años setenta el Sr. Jorge Alonso Álvarez, natural de Cuba, comenzó el negocio de las motocicletas bajo el nombre de Mirabel Motor Scooter, con el fin de brindar servicios de alquiler a los turistas que visitaban la zona de San Juan, Puerto Rico. Este establecimiento contaba con un taller de reparación con el fin de mantener en óptimas condiciones las motocicletas que se utilizaban exclusivamente para alquiler.

El conocimiento, el buen servicio y la experiencia adquirida durante los años, fueron factores clave para que los clientes locales solicitaran los servicios para sus equipos personales.  De acuerdo, a las necesidades y peticiones de los clientes, el Sr. Jorge Alonso Álvarez, realizó cambios en la estructura de su negocio, eliminando el alquiler de motoras y convirtiendo la empresa en un concesionario de piezas y servicio bajo el nuevo nombre de Honda de Hato Rey.

Después de varios años, eliminan la exclusividad limitada a una marca y crean el concepto de una tienda que ofrece una variedad de marcas y diversas alternativas. De esta forma, continúan ofreciendo servicios, cumpliendo con las necesidades de los clientes con éxito. Gracias al compromiso de su equipo de trabajo hoy día, la empresa se conoce como Cycle Sport Center, Inc. brindado servicios a su clientes locales e internacionales en las Islas Vírgenes, República Dominicana, Haití y el continente europeo.

Después de casi 40 años de servicio, Cycle Sport Center, Inc. actualmente cuenta con cuatro almacenes tipo tienda de 27,000 pies cuadrados en una estructura proveyendo un sin número de variedad en accesorios, gomas y piezas para ATV, motocicletas, scooters y UTV.  Dentro de la disponibilidad en inventario se encuentran marcas reconocidas, tales como Avon, Bel Ray, Cheng Shin, Cobra, Dunlop, Emgo, Kenda, Metzeler, Maxxis, Michelin, Pirelli, SBS, Tsubaki, Yuasa y piezas originales Honda, Kawasaki, Kymco, Yamaha y Suzuki.

Cycle Sport Center, Inc. se ha considerado una de las empresas más sólidas en el mercado de las motocicletas en Puerto Rico ofreciéndole la confianza y la seguridad a sus clientes.  Actualmente, sus hijos Arlene Montañez-Alonso, David George, e Ivette M. Alonso Triack siguen los pasos de su padre manteniendo la visión original y dirigiendo la compañía con la misma confianza y el compromiso de su trabajo hacia las nuevas generaciones.

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